Columna Semanal

Otras Columnas

02-10-2016 San Sebastián 2016
Palmarés: De dulce y agraz
22-09-2016 Argentino QL vs la crítica
La conjura de los necios 2 o 3 o 4...
05-09-2016 Gene Wilder (1933-2016)
La sonrisa torcida del Dr. Fronkonstin
29-08-2016 Toni Erdmann, de Maren Ade
Abraza un Kukeri
27-08-2016 Debuta Tornamesa Mabuse
Tócala de nuevo, Bruce

Textos relacionados


Invierno de película
Días de cine en la ciudad luz

Blancanieves, de Pablo Berger ¿Por qué no te callas?

Este domingo 16 de febrero se entregaron los premios Goya resultando la gran triunfadora de la noche, Blancanieves, una adaptación libre del clásico cuento infantil. La cinta obtuvo 10 galardones, encabezados por el premio al mejor film del año del cine español. Lo singular: Blancanieves es una cinta muda y en blanco y negro... ¿Una moda a la siga de El artista?

Por Jorge Morales desde París

El año pasado cuando viajaba al Festival de Cine de Valdivia, me tocó ver en el bus una copia cuidadosamente pirateada de El artista. La película muda de origen francés que obtuvo cinco Óscar el 2012, incluido el galardón a mejor película, fue vapuleada por un sector de la crítica que no se contuvo en insultos encontrando, entre otras atrocidades, un escándalo la secuencia en que el director Michel Hazanavicius ocupa sin vergüenza la música original de Bernard Herrmann para la obra maestra de Hitchcock, Vértigo (un ultraje que a mí también me indignó, por cierto). Pero, en términos generales, las encendidas reacciones que marcaron la recepción de la cinta, no fueron mi caso. Aunque la película no me entusiasmó demasiado, me pareció encantadora y un ejemplo básico, modesto e ilustrativo de que el sonido en el cine es un recurso del que perfectamente se puede prescindir (si se quiere, obviamente). Pero la prueba de fuego fue verla de nuevo en el bus. Como la mostraron con los parlantes apagados y no entregaron auriculares –esa curiosa práctica de darte premeditadamente un servicio a medias-, la vi de verdad sin sonido y puedo dar fe: es "la" película perfecta para ser exhibida en un bus. El "mercado" chileno del transporte colectivo está "monopolizado" por las películas de acción, y en alguna época, particularmente con las cintas de artes marciales. Pero estoy convencido que en los largos trayectos a lo largo y ancho del país de los autobuses nacionales, se podría exhibir sin problemas cine mudo, especialmente en invierno. Con sueño, tratando de olvidar los ronquidos del vecino y aturdido por la narcótica calefacción, es un ambiente perfecto para que el público viajero agudice el sentido de la vista y se preocupe solamente de observar y comprender.

En el tiempo que llevo acá en París, he vivido la experiencia del cine un poco "a la muda". Mi pobre dominio del francés (y del inglés) me ha obligado a tratar de seguir la trama y los matices de una película sólo a través de sus imágenes sin entender cabalmente lo que se está diciendo. Si la película es en inglés, la experiencia es más sencilla simplemente porque todos tenemos el oído entrenado después de una vida "escuchando" cine de Hollywood, y mi conocimiento del francés escrito, es cada vez mejor gracias a los benditos subtítulos. Convengamos, además, que en un 90% las películas norteamericanas son tan predecibles que a veces leyendo la sinopsis uno sabe hasta cómo va a terminar. Ahora bien, cuando la película es en francés, la experiencia puede ser una pesadilla sobre todo si la cinta es mediocre. Como Main dans la main, el nuevo largometraje de la francesa Valerie Donzelli –la misma directora de la notable Declaración de guerra que se estrenó en Chile en enero-, que muestra la "estrecha relación" de dos bailarines que tras un encuentro fortuito quedan prendados literalmente uno del otro como si fueran uno solo. Empieza como una flojísima comedia disparatada y termina a fuerza como un deslavado romance melancólico. En cualquier idioma, y haciendo la salvedad de que "entendí" un 50% de lo que se decía, una insufrible payasada.

Blancanieves

Hace unas semanas con dos amigos que anduvieron por estos lares –ambos igualmente novatos en lengua francesa- decidimos ir a ver una película. Para no hacerlos pasar por mi rutina de "desciframiento" sugerí que fuéramos a ver Blancanieves, un largometraje español similar a El artista. O sea, mudo, en blanco y negro, pero "moderno". La cinta acaba de arrasar este domingo en los Goya, los cabezones premios de la Academia del Cine Español, en una ceremonia que es la peor propaganda que el cine hispánico puede hacer de sí mismo; un evento televisivo mil veces más aburrido que el del Óscar, pero que por desgracia quita ese raro y casi imposible deseo de pasarte unas horas viendo películas ibéricas. Blancanieves es una revisión al cuento de los Hermanos Grimm, pero a la española. Con una trama con mucha tauromaquia y música flamenca (sólo faltó que transcurriera en la guerra civil), muestra a un torero que tras una tarde negra en la arena termina inválido, pierde a su amada esposa al dar a luz a su hija, y queda a merced de una enfermera malvada. Deprimido, el matador se despreocupa de su primogénita que pasa al cuidado de su abuela, hasta que ésta muere y vuelve a quedar bajo su custodia. Su nueva mujer (la maléfica enfermera), dueña y señora de la casa, trata a la pobre chica –a la postre Blancanieves- como parte de la servidumbre…

El estilo del director Pablo Berger es híbrido. Una puesta en escena tan impactante como inconsistente, donde se da permiso para todo, ocupando toda la gama de lentes posibles, moviendo neuróticamente la cámara en algunas secuencias y haciendo un montaje a lo video clip, si lo precisa. Y de muda-muda tiene poco; es hasta "ruidosa". La música está en cada milímetro de la película y es estruendosa y subrayadamente atmosférica (para que uno no se equivoque sobre qué "debe" sentir). La segunda parte mejora sustantivamente con la aparición de los enanos que le ponen algo de "color" a la historia, y el notable y bizarro broche final de necrofilia rosa muy digno de Freaks (Tod Browing, 1932).

¿Por qué hacer cine mudo? Aparte del ejercicio de estilo, una sincera exploración artística, el homenaje bobo o una deliberada voluntad de llamar la atención, no hay razonablemente una explicación. Desde luego, recrear la pureza de los mecanismos narrativos del mudo implica un difícil desafío porque se apuesta por un relato centrado en las imágenes quitando una herramienta esencial como el sonido que, en el peor de los casos, se ocupa como una "muleta" ante la incapacidad de resolver un nudo dramático sólo con elementos visuales. Sin embargo, aparte de no ser completamente silentes (tienen música hasta por los codos), los argumentos tanto de El artista como de Blancanieves son tan básicos que resolverlos visualmente no entraña un gran desafío, y están muy lejos de la simplicidad sofisticada y compleja de las obras maestras del cine mudo. En otras palabras, estas películas usan superficialmente un lenguaje en vez de utilizarlo en toda su magnitud y posibilidades, y se valen más de la excentricidad del experimento que de la convicción de un verdadero emprendimiento estético (doy por sentado que ninguno de esos directores volverá a hacer un film similar). En ese sentido, los verdaderos y genuinos momentos de cine "mudo" hoy día son aquellos, por ejemplo, en que un rostro revela por si solo la intensidad de una emoción. No es raro, a propósito de eso, que antes de entregarle el Oso de Plata a Paulina García en  la ceremonia de clausura de la Berlinale, se haya utilizado únicamente para ilustrar su actuación en Gloria una escena donde su personaje no dice palabra y escucha entre aturdida e hipnótica Aguas de marzo, de Tom Jobim.

De todas maneras, estoy totalmente seguro de que Blancanieves sería un exitazo en el "mercado" de los buses. Su tronadora y recursiva banda sonora puede soslayarse sin problema dejándola en "mute". Y en los buses tendrá siempre un público cautivo. Al menos, hasta la próxima parada.

 

Este artículo aún no tiene comentarios. Puedes ser el primero en comentar.

Nombre
E-mail (no será publicado)
  (Escriba las letras y números que aparecen en el recuadro).
Código de confirmación
Comentario
 
Buscador
Quiénes Somos | Contáctanos